Entrevista a Gladys Monge: “El ser humano no para de contaminar”

Entrevista a Gladys Monge: “El ser humano no para de contaminar”

Al inicio de la pandemia, y por efecto de las cuarentenas estrictas en todo el mundo, se habló del descanso que se le estaba dando al planeta. Sin embargo, la ingeniera química, especialista en manejo de residuos y en temas ambientales y docente de la UTEC Gladys Monge señala a El Comercio que, tras un año de emergencia sanitaria, mientras se busca una solución contra el COVID-19 no se hace mucho para mitigar el impacto que están causando en el planeta los desechos.

— ¿Cómo evalúa la reacción de la ciencia a un año del inicio de la pandemia?

Es una situación muy difícil. En los temas en los que me desempeño, la respuesta ha sido complicada porque todos hemos empezado a generar residuos en una magnitud nunca antes vista. Antes no usábamos, por ejemplo, mascarillas y ahora es común y obligatorio usarlas. Por ello estamos viendo no solo a gente que las desecha de la manera correcta, sino a gente que las tira en la calle, en el suelo. Aunque muchos no lo entiendan, eso también atenta no solo contra el medio ambiente, sino contra nuestra salud.

— Pero el manejo de residuos ha sido un problema que nos acompaña desde hace más tiempo…

El manejo de residuos en nuestro país no era de los mejores y pasamos a agravar la situación con todos estos nuevos desechos que, por su cantidad, empiezan a convertirse en un problema ambiental y de salud. Sin embargo, la comunidad científica está empezando a tratar este nuevo enfoque del problema. Por ejemplo, en la UTEC estamos desarrollando proyectos al respecto. Pero no solo es el tema de elementos como mascarillas y otros materiales bien identificables, sino otros productos. ¿Se ha preguntado cuánto se contamina al fabricar un celular? Y si a eso le sumamos el tema de la obsolescencia programada, es decir, que se planifique cuándo será el fin de la vida útil de ese equipo electrónico, el problema ambiental se agrava.

— Ya serían dos problemas: los residuos por pandemia y por el consumismo…

No necesariamente todos nos percatamos sobre los problemas ambientales que está generando esta situación de emergencia sanitaria global. En el campo del inadecuado manejo de residuos, hay una problemática. Cuando el año pasado vimos animales tomando las calles de algunas ciudades por la ausencia de humanos, se trataba de situaciones inusuales, pero confirmamos que no era algo que duraría en el tiempo. El planeta se tomó un respiro, pero los humanos seguimos aquí, seguimos generando desperdicios y eso no ha parado. No paramos de contaminar.

— Pero hay quienes en esta pandemia han aprendido a segregar mejor sus residuos, a reutilizar materiales…

Sobre todo, son los más jóvenes los que están tomando más conciencia sobre su papel en el cuidado del medio ambiente, su papel en el planeta. Tal vez, porque eso no estuvo inculcado en generaciones anteriores y por eso los mayores siguen sin saber cómo (y sin las ganas de) segregar residuos. Los jóvenes vienen con ese conocimiento y lo promueven con más fuerza. Confío en que estas acciones favorables para el planeta se multipliquen, que crezcan y que se conviertan en una costumbre y no que estén ligadas a situaciones extremas como una pandemia.

— Estando tan cerca de las elecciones presidenciales y parlamentarias, ¿qué debemos buscar en candidatos con respecto a propuestas relacionadas con el cuidado del medio ambiente?

Es importante conocer sus planes de trabajo y sus propuestas en el tema ambiental, cuáles son sus planes para abordar este tema. Del mismo modo, saber qué proponen para resolver un tema que arrastramos en nuestro país desde hace tanto tiempo, como es el del manejo de los residuos sólidos, pero también para saber cómo afrontarán la limpieza pública y cómo generarán conciencia en la población sobre un tema tan sensible como este. Es necesario buscar a quienes se comprometan a trabajar de manera conjunta e intersectorial, porque esta no es una responsabilidad solo del Ministerio del Ambiente, sino, por ejemplo, también del Ministerio de Educación. No existe una sola persona que pueda decir que estos temas no le tocan, porque no hay quien pueda decir que no genera desperdicios.